sábado, 12 de julio de 2014

Reflexiones bajo la luna llena

Me quedo extasiada viendo cómo esta fresca brisa nocturna mece las ramas de los pinos y las hierbas más altas. Hay en ello una grandeza y una reverencia imposible de explicar.

En momentos de gran lucidez como este, abrazo y bendigo por entero mi naturaleza humana. Acepto el deseo de éxito, reconocimiento, libertad financiera y serenidad emocional , pero mi único objetivo verdadero es ese estado de conciencia en el que percibo sin esfuerzo alguno, la insubstancialidad de todas las cosas y la infinita alegría que la acompaña.

Gracias a Dios por este INSTANTE!

Noche de luna llena.



...La tarde se prolonga más allá de sí misma, y la hora, contagiada de eternidad, es infinita, pacífica, insondable
-Anda, Platero...

Juan Ramón Jimenez