domingo, 22 de febrero de 2009

Azul marino


Silencio...
en la profundidad hay silencio...
ella necesitaba silencio...
así se lo había dicho el hijo del clan del viento y todas las otras criaturas de la tierra, del aire y del océano.
Ahora ya no necesitaba más palabras, sólo descender, y descender y descender...
Y del fondo más oscuro, profundo y silencioso, ella había rescatado -por fin-una perla verdadera:
Las lecciones más simples sobre
la Tierra por lo general suelen ser las más difíciles. No porque las lecciones sean inherentemente difíciles sino porque la tendencia humana en el estado despierto socava lo que sirve al crecimiento y a la expansión. El ego no quiere perder el control de la vida; no quiere ir al silencio de la noche oscura- o cuando menos no hasta que el alma escoja firmemente por la alineación con la Verdad.
Hoy hace dos años que ella transita por el valle de los milagros, una tierra de suaves colinas donde las lecciones son rápidas, poderosas, y transforman toda la existencia...Gracias...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Rompe con el silencio del mar...y el de tu vida...estás aquí para sumergirte yluego ascender Paci-elo.Y todos esperamos a la nueva criatura que siempre has sido.