El mar en algún lugar de la costa entre Marbella y Fuengirola. Verano 2017
La Verdad,
la Belleza,
eso que yo llamo Dios, Espíritu, o Ser,
es tan sencillo, y está tan cerca,
que a menudo,
sin darme cuenta,
lo paso por alto.
Pero otras veces,
por la gracia de un milagro,
muy simple y cotidiano,
lo escucho, lo siento y lo amo.
La Verdad,
la Belleza,
eso que yo llamo Dios, Espíritu, o Ser,
es ese mundo azul que veo dentro,
esa brisa en las ramas de un árbol,
esa calma tan dulce que me invade,
ese tú y ese yo- corazón con corazón-
ese Amor en las olas del mar
y en la arena de la playa.
Hoy digo sí, a ese Viento que me eleva.